El boceto final (en este caso los dibujos, la tipografía y los bordes de los paneles) proporciona al impresor áreas claramente definidas donde situar y superponer los colores. El boceto final se imprimió en negro, los pigmentos y los colores se hicieron llegar hasta las líneas negras, y las líneas negras se superponen parcialmente a las áreas donde un color se encuentra con otro. Esto no sólo es muy práctico (hace que muchos pequeños errores de registro pasen inadvertidos), sino que además permite conseguir el dinámico efecto visual característico del arte del comic.
Pluma en blanco y negro preparado para la cubierta del comic. El dinamismo de la ilustración se propone garantizar al lector que encontrará, en cada página, imágenes excitantes e imaginativas.