Tratemos ahora de reproducir de manera más realista la manzana apenas esbozada a lápiz en la página anterior. Procedamos en el trabajo utilizando markers de colores de punta fina. Para obtener el mejor efecto, sugiero que no emplees más de tres tonos de color; al lado de la ilustración encontrarás la muestra de los colores utilizados en nuestra manzana. Los ejercicios que proponemos spn de dos tipos: el primero, que ves en esta página, se lleva a cabo con un trazado vertical muy ordenado; el segundo, reproducido en la página siguiente, se realiza con trazos más libres y entrecruzados.
Realiza los primeros trazos con el marker del color indicado al lado del dibujo. No olvides marcar la zona de luz desde el principio. En una segunda fase, repasa el color de la parte más oscura de la manzana, conservando urja pequeña zona de luz reflejada cerca del límite de la fruta, en la parte más oscura. Este truco conseguirá el efecto óptico de la redondez en los objetos que deben tener volumen. En la tercera fase, añade el verde en la zona que ha quedado blanca y el marrón del rabito. Termina el dibujo en la cuarta fase, delimitándolo con el marker negro. En los dibujos realizados con trazos más libres, la secuencia es idéntica, pese a la diferencia de la técnica.
Aquí puedes utilizar un trazado más vibrante, que producirá en la manzana, dibujada con mayor libertad, un resultado más eficaz. Empieza con una primera extensión del color, efectuada mediante trazos breves con diferentes inclinaciones; superpon entonces otra serie de trazos, variando siempre la inclinación, de forma que aparezca una trama parecida a un tamiz. Prosigue con nuevos trazos de color, realizados del mismo modo, hasta llenar de color todo el interior. Advierte que el contomo no se ha trazado con una línea neta como en el ejemplo de la página anterior, sino que se ha resuelto con unos toques de mayor efecto pictórico. Trata de encontrar el estilo que se adapte mejor a tu carácter. Es muy importante que el visualizer tenga un estilo característico, que constituya casi una «marca» de su producción y que indique una personalidad bien definida. Eso se consigue con el tiempo, pero es necesario seguir desde el principio la forma instintiva que cada uno tiene de visualizar un objeto y de encontrar la técnica más adecuada para representarlo.